Reducir el consumo de luz en verano no es una tarea difícil, solo se necesitan algunos tips. El pico de consumo de luz en se produce al mediodía, ya que es cuando más aprieta el calor, y se realiza un mayor consumo de aire acondicionado, ventilador, u otros electrodomésticos.
Algunas recomendaciones para reducir este consumo, son las siguientes:
- Graduar correctamente la climatización del hogar. No es necesario ni bueno para la salud poner la temperatura del aire acondicionado más baja de 24 grados, además cada grado aumenta la factura notablemente.
- Aislar bien el hogar. Un mal aislamiento de tu vivienda produce un gran escape de energía y temperatura. Para evitarlo puedes instalar ventanas con doble cristal, o utilizar burletes en las puertas y ventanas. Llevando a cabo un buen aislamiento puedes ahorrar hasta un 20% anual en gastos de refrigeración, según el Ministerio para la transición ecológica y el reto demográfico.
- Aprovechar la ventilación cruzada. Las horas con temperaturas más bajas pueden aprovecharse para renovar el aire del hogar, a la misma vez que se intenta bajar la temperatura del mismo.
- No es necesario refrescar todas las habitaciones, se debe priorizar dónde es más necesario. Además, una vez que una sala esté refrescada o vacía, se deben apagar los artilugios de aire de la misma.
- La potencia es importante. El pago de la potencia eléctrica varía según los kW, a más kW, más dinero. Es importante antes de dar de alta la luz, calcular el término fijo necesario para la vivienda, ya que esto puede suponer un buen ahorro a la larga.
- Desenchufar los aparatos no utilizados. No basta con apagarlos simplemente, ya que siguen consumiendo energía conectados a la red eléctrica.
- Utilizar los electrodomésticos de forma eficiente. Se pueden escoger programas de baja temperatura para la lavadora y lavavajillas, evitando así calentar el agua, que es el momento de máximo consumo de los electrodomésticos.
- Comprar electrodomésticos con eficiencia energética. Si estás pensando en reemplazar un electrodoméstico, deberías tener en cuenta un factor más a parte del precio, potencia y durabilidad. Actualmente existen algunos electrodomésticos de mínimo consumo, clasificados bajo las etiquetas B. Aunque al principio puedan resultar más caros de adquirir, a largo plazo pueden suponer un ahorro del 40% del consumo.
- Apostar por las LED. Estas desprenden menos calor que las bombillas incandescentes, y además consumen menos energía ya que pierden menos calor y son más eficientes.
- Utiliza otros aparatos para bajar la temperatura. Los ventiladores consumen un 90% menos que los aires acondicionados, y pueden descender la temperatura ambiente hasta 5 grados. Si estás pensando en adquirir uno, los de techo son los más eficaces.
Otra de las grandes preguntas en verano es qué tarifa de luz conviene más en el caso de tener una segunda vivienda de vacaciones, y la conclusión es el uso de una de las siguientes:
-FLEXI UNO. Esta tarifa posee el mismo precio de kWh durante todo el día, por lo que se puede consumir electricidad sin preocupaciones y en cualquier momento.
-FIJO. Se paga todos los meses lo mismo, por lo que los meses de vacaciones se compensan y no hay sorpresas.
-FLEXI TRES. Con esta tarifa de discriminación horaria se obtiene el mejor precio los fines de semana y festivos.
Ahorrar en la factura durante el verano es posible, solo hay que llevar a cabo una buena gestión de los recursos disponibles en el hogar.